Urano, el distante gigante de hielo, alcanzará su máxima visibilidad este año el 21 de noviembre, ofreciendo una rara oportunidad para que los observadores de estrellas lo detecten, aunque se recomienda encarecidamente un telescopio. Este evento, conocido como oposición, ocurre cuando Urano se posiciona frente al sol desde la perspectiva de la Tierra, lo que lo hace parecer más brillante en el cielo nocturno.
Comprender la oposición
Cuando un planeta alcanza la oposición, está en su punto más cercano a la Tierra, maximizando su brillo aparente. Para Urano, esto significa una magnitud de +5,6 alrededor del 21 de noviembre. Aunque técnicamente es visible a simple vista en condiciones ideales (cielos extremadamente oscuros, visibilidad perfecta), unos binoculares o un telescopio con una apertura de al menos 8 pulgadas (200 mm) harán que sea mucho más fácil de localizar. Para poner esto en perspectiva, Venus en su punto más brillante alcanza una magnitud de -4,6, mucho más visible.
Cómo encontrar Urano en el cielo nocturno
En la tarde del 21 de noviembre, mire hacia el horizonte oriental después del atardecer. La constelación de Tauro estará baja en el horizonte, con el brillante cúmulo de estrellas de las Pléyades brillando prominentemente sobre ella. Urano aparecerá como un punto débil y verdoso ubicado a menos de 5 grados en la parte inferior derecha de las Pléyades. Utilice el puño cerrado con el brazo extendido como guía aproximada: Urano estará aproximadamente a la mitad del ancho de su puño de las Pléyades.
Por qué esto es importante
Urano es un planeta inusual: inclinado de costado, orbita alrededor del Sol como un barril rodante en lugar de girar erguido como la Tierra. También está increíblemente distante, a 2,77 mil millones de kilómetros (1,72 mil millones de millas) de distancia, y solo ha sido visitado una vez por una nave espacial (Voyager 2 en 1986). Verlo, incluso como un pequeño punto de luz, es un recordatorio de la inmensidad de nuestro sistema solar y los misterios que aún esperan ser explorados.
Atrapar a Urano en oposición brinda una rara oportunidad de conectarse con un mundo distante, lo que lleva a reflexionar sobre cuánto queda por descubrir en el universo.








































