Una nueva investigación sugiere que algunas de las lunas heladas más pequeñas del sistema solar exterior pueden contener océanos subterráneos que están… hirviendo. A pesar de esta condición extrema, los científicos creen que la vida aún podría sobrevivir en estos ambientes acuáticos ocultos.
Los océanos ocultos de las lunas heladas
Durante años, se ha acumulado evidencia de que varias lunas heladas, como Encelado de Saturno, no están completamente congeladas. En cambio, es probable que posean océanos líquidos intercalados entre sus caparazones helados y núcleos rocosos. Esto es importante porque dondequiera que exista agua en la Tierra, la vida encuentra un camino. La perspectiva de estos océanos subterráneos los convierte en los principales candidatos en la búsqueda de vida extraterrestre.
Disminución del hielo, aumento de las temperaturas
El geofísico Maxwell Rudolph dirigió un estudio que examina cómo los cambios en el espesor de las capas de hielo afectan la presión sobre estos océanos ocultos. El equipo descubrió que a medida que el hielo del fondo de estas lunas se derrite, la presión sobre los océanos que se encuentran debajo disminuye.
En lunas más pequeñas (como Mimas, Encelado y Miranda) esta caída de presión podría alcanzar un “punto triple”. Aquí es donde el hielo, el agua líquida y el vapor de agua pueden coexistir simultáneamente. ¿El resultado? Las capas del océano más cercanas a la capa de hielo podrían hervir.
Sin embargo, esta no es la ebullición a alta temperatura que conocemos en las cocinas. Es un proceso de baja temperatura que ocurre cerca del punto de congelación (0°C / 32°F), lo que significa que cualquier vida potencial debajo de la capa de ebullición probablemente no se vería afectada.
Las lunas más grandes se fracturan en su lugar
Las lunas heladas más grandes (de más de 600 kilómetros de ancho), como Titania de Urano, se comportan de manera diferente. En lugar de alcanzar el punto triple, sus capas heladas se rompen bajo la presión reducida. El estudio sugiere que la geología arrugada de Titania puede ser evidencia de un adelgazamiento de la capa de hielo en el pasado seguido de una nueva congelación.
Implicaciones para la vida extraterrestre
El proceso de ebullición podría crear clatratos, estructuras heladas que atrapan moléculas de gas. Los investigadores planean investigar más a fondo este fenómeno para comprender cómo los gases liberados interactúan con la superficie y qué características geológicas podrían resultar.
El descubrimiento no elimina la posibilidad de vida; simplemente añade otro factor complejo a considerar en la búsqueda de ambientes habitables más allá de la Tierra. La presencia de océanos en ebullición, aunque inusual, no excluye necesariamente la vida si las condiciones permanecen lo suficientemente estables debajo de la zona de ebullición.
